Descubre el Secreto de una Dieta Equilibrada: Prebióticos y Probióticos en la alimentación de Perros y Gatos.
¿Te has preguntado alguna vez cómo mejorar la salud de tu perro o gato a través de su alimentación? En el mundo de la nutrición animal, hay un tema que está ganando cada vez más atención y podría ser la clave para optimizar el bienestar de tu compañero de cuatro patas: los prebióticos y probióticos. Estos componentes no solo favorecen una digestión saludable, sino que también juegan un papel crucial en el fortalecimiento del sistema inmunológico.
En este post, exploramos en profundidad cómo los prebióticos y probióticos pueden transformar la dieta de tu perro o gato, proporcionándoles una vida más sana y feliz.
La salud y el bienestar de perros y gatos, como en humanos, depende en gran medida de la composición, abundancia y actividad de los microorganismos de su sistema digestivo y otros órganos como la piel.
En el tracto intestinal existe una compleja comunidad de microorganismos, un ecosistema que actúa en diferentes vías, afectando tanto a la absorción y el metabolismo de los nutrientes como a funciones de protección.
La microbiota canina y felina suele encontrarse alterada en presencia de varias enfermedades y se ha visto que cualquier perturbación en la composición de la microbiota conduce al desarrollo de múltiples problemas de salud (diarrea, obesidad, alergias y otros síntomas de estrés).
Estudiar y conocer mejor la microbiota canina y felina y comprender cómo afecta al mantenimiento de la salud de los animales a largo plazo podría beneficiar al tratamiento de dichas enfermedades.
Ambos, probióticos y prebióticos, están disponibles en algunos alimentos y también como suplementos alimentarios. Sin embargo, es importante consultar con un profesional de la salud antes de incorporar estos suplementos en la dieta.
QUE ES LA MICROBIOTA
La microbiota se define como el conjunto de microorganismos presentes en un ambiente definido, la microbiota se refiere a los microorganismos que habitan en nuestro cuerpo. Estos microorganismos incluyen bacterias, virus, hongos, arqueas y protozoos.
La microbiota es esencial para un buena salud y bienestar, ya que desempeña varias funciones importantes:
- Regulación del sistema inmune: La microbiota ayuda a regular y fortalecer nuestro sistema inmune.
- Regulación del metabolismo: Ayuda en la digestión de ciertos alimentos que no han podido ser degradados en el intestino delgado o estómago.
- Balance energético: Participa en la producción de energía y vitaminas, como la vitamina K y el complejo B12.
- Protección contra patógenos: Protege contra bacterias patógenas que pueden provocar enfermedades.
- Regulación de neurotransmisores intestinales: Regula la secreción de neurotransmisores intestinales relacionados con el eje intestino-cerebro.
La composición de la microbiota puede verse afectada por varios factores, incluyendo la dieta, el uso de antibióticos, ciertas condiciones médicas, y el genotipo del huésped. Por lo tanto, mantener una microbiota saludable es crucial para una buena salud general.
La microbiota canina y felina
Perros y gatos tienen un elevado número de microorganismos en el tracto gastrointestinal, superior incluso al que tenemos los seres humanos.
Además, perros y gatos difieren en especies de bacterias y levaduras, las cuales incluso varían según la raza y el área geográfica en la que viven. Dentro de un mismo individuo, la diversidad y concentración de las especies de microorganismos varía también a lo largo del tracto digestivo. De hecho, cada perro o gato tiene un ecosistema de microorganismos diferente y único.
Firmicutes, Bacteroidetes, Proteobacteria y Fusobacteria así como Eubacterium son las especies predominantes tanto en perros como en gatos. Se han encontrado también hongos. Los Lactobacilos habitan en todas las partes del intestino de perros y gatos. Se han encontrado bifidobacterias en heces caninas pero parecen ser más importantes y abundantes en gatos, que presentan mayor abundancia y biodiversidad de especies.
La microbiota de la piel juega un importante rol en la función de la misma, mejorando la barrera protectora frente a microorganismos potencialmente patogénicos. Se ha encontrado una alta y diversa población de microorganismos en la piel canina, mayor en las zonas cubiertas de pelo que en las zonas de mucosa. Se ha evidenciado mucha menor riqueza de la microbiota en la piel de perros con alergias.
QUE ES LA DISBIOSIS
La disbiosis es una alteración en la estructura y/o funciones de los microorganismos que habitan en la piel y tapizando el interior de los intestinos y la vagina. Se refiere al desequilibrio del equilibrio microbiano de la microbiota normal, debido a cambios cuantitativos o cualitativos de su composición, cambios en su funcionamiento o actividades metabólicas, o bien, a cambios en su distribución.
Este desequilibrio puede ser más prominente en el tracto digestivo o en la piel, pero también puede ocurrir en algunas superficies expuestas o en la mucosa como en la vagina, los pulmones, la nariz, los senos, las orejas, las uñas o los ojos.
La disbiosis puede ser consecuencia del efecto de los tratamientos antibióticos, estrés físico o psicológico, radiación, alteración en la peristalsis o modificaciones de la dieta. Para tratar la disbiosis con frecuencia se recurre al uso de probióticos y prebióticos.
En resumen, la disbiosis es una alteración en la estructura de la comunidad microbiana intestinal, que resulta anormal frente a lo que consideramos una microbiota sana y diversa.
QUE SON LOS PRE Y PROBIOTICOS
Los probióticos y prebióticos son componentes importantes que pueden tener efectos beneficiosos en la salud de nuestros compañeros:
Probióticos
Son alimentos o suplementos que contienen microorganismos vivos destinados a mantener o mejorar las bacterias “buenas” (microbiota normal) del cuerpo. Los probióticos más utilizados en perros y gatos suelen ser bacterias beneficiosas que ayudan a su tracto digestivo. Algunas de estas bacterias pueden encontrarse en alimentos del día a día, como los yogures, el kéfir y el chucrut. Podemos encontrar probióticos en algunos piensos o suplementos alimenticios bajo el nombre de fructoligosacáridos (FOS), manano oligosacáridos (MOS) o arabinogalactanos entre otros. Asimismo, existen también en el mercado probióticos específicos para nuestros compañeros peludos.
Cuando se administran de manera adecuada, llegan al tracto digestivo, donde se incorporan a la microbiota ya existente y ejercen efectos. Es decir, se aportan más microorganismos sanos al sistema digestivo para mejorar la biodiversidad, la cantidad y la actividad de la microbiota. Algunos de los probióticos comúnmente usados son:
- Lactobacillus casei
- Lactobacillus acidophilus
- Enterococcus faecium
- Bifidobacterium bifidum
Prebióticos
Son alimentos (generalmente con alto contenido de fibra) que actúan como nutrientes para la microbiota. Los prebióticos son compuestos que el organismo no puede digerir, pero que tienen un efecto fisiológico en el intestino al estimular, de manera selectiva, el crecimiento y la actividad de las bacterias beneficiosas. Algunos de los prebióticos más utilizados en perros y gatos se encuentran en alimentos comunes. Aquí te dejo algunos ejemplos:
- Plátanos: Son una fuente natural de prebióticos.
- Cebollas: Contienen prebióticos, aunque deben usarse con precaución ya que en grandes cantidades pueden ser tóxicas para los perros.
- Espárragos: Son otra fuente de prebióticos.
- Granos enteros: Pueden proporcionar prebióticos.
- Zanahorias, raíces de achicoria o alcachofas: Estos alimentos se suelen procesar para obtener prebióticos naturales.
- Tupinambo, manzanas o pulpa de remolacha: También se pueden utilizar para obtener prebióticos.
- Kiwi y manzana: Se pueden añadir a la dieta de las mascotas como fuente de prebióticos.
- Kéfir o yogur natural de cabra u oveja: Son preferibles a los de vaca y pueden ofrecerse a las mascotas.
- Alimentos fermentados como el chucrut: Pueden ser una buena fuente de prebióticos.
Para ser considerado prebiótico un ingrediente debe ser no digerible (resistir la acidez estomacal y a las enzimas digestivas) y llegar al colon. Debe ser fermentado por sus microorganismos y estimular sólo la multiplicación y acción de microorganismos beneficiosos. Hasta el momento, los únicos ingredientes que cumplen con todo esto son:
- Oligofructosacáridos (FOS)
- Galactooligosacáridos (GOS)
- Mananooligosacáridos (MOS)
- Inulina
- Lactulosa
- Goma arábica
Algunas fibras vegetales sí han demostrado efectos beneficiosos, aunque no sean prebióticos estrictos:
- Arabinogalactanos
- Levadura de cerveza: sí está considerado un prebiótico por su composición en beta-glucanos, quitina y MOS.
- MOS: tienen afinidad específica con enteropatógenos como E. coli y Salmonella, se adhieren a ellas y son excretados a través de las heces. Por otro lado, estimulan el crecimiento y actividad de la flora bacteriana beneficiosa en el tracto intestinal como bifidobacterias y lactobacilos.
- Los beta-glucanos: son polisacáridos que estimulan el sistema inmunitario, reforzando así las defensas naturales contra bacterias, virus y parásitos.
ALTERACIÓN DE LA MICROBIOTA INTESTINAL
Cuando la salud del tracto digestivo es desfavorable, hay animales con posible disbiosis, es decir, desequilibrio en el número o tipo de colonias de microorganismos que colonizan y forman la microbiota intestinal.
Este tipo de desajustes, a la larga, pueden dar lugar a enfermedades como diabetes, enfermedad inflamatoria del digestivo (IBD), síndrome metabólico, alergias o intolerancias, alteraciones incluso a nivel comportamental o que afecten al estado de ánimo del animal.
Las bacterias tienen mucho poder en la salud ya que todo está conectado. Los sistemas que forman los cuerpos humanos y los de los animales están conectados de miles de maneras gracias al sistema nervioso, sistema cardiovascular, sistema linfático… Y por todos ellos hay diferentes tipos de microorganismos que ayudan en el equilibrio de la salud.
EL INTESTINO: EL SEGUNDO CEREBRO
Todo el mundo es consciente de la importancia del cerebro y sus funciones. El intestino de los animales presenta millones de neuronas y produce neurotransmisores como la serotonina o la dopamina en abundantes cantidades. Por ello se habla de sistema nervioso entérico, cerebro digestivo o segundo cerebro.
La mayoría de las células del cuerpo presentan receptores para dichos neurotransmisores, lo cual implica que el intestino de las mascotas es capaz de transmitir información a otras células del cuerpo. Es decir, que el intestino no solo tiene funciones de digestión y absorción de nutrientes, sino también de neurotransmisión, e incluso mantiene una relación muy estrecha con el sistema inmune.
Es importante la obtención del triptófano a partir de la dieta, promoviendo síntesis de serotonina y melatonina, dos sustancias muy importantes tanto para el humano como para el animal. Estas están relacionadas con los ciclos de sueño, estado de ánimo y comportamental, entre otros. Estas sustancias ayudan a que el proceso de digestión sea más ligero para el animal y que aproveche mejor los nutrientes ofrecidos en la dieta, apoyan el funcionamiento del sistema inmune asociado al intestino y, además, ayudan en los procesos de intolerancias y alergias, ya que luchan por reducir el estado inflamatorio generalizado que puede presentar el cuerpo.
EFECTO DE LA DIETA EN LA MICROBIOTA
La composición e ingredientes de los alimentos ingeridos influyen significativamente en la función gastrointestinal, la composición de la microbiota y sus productos metabólicos en el intestino.
La alimentación de los animales ha ido evolucionando desde una compuesta por presas de caza y las sobras humanas (ambas ricas en probióticos naturales para perros y gatos) hasta los modernos piensos científicamente formulados para ser nutricionalmente equilibrados para cada tipo de animal según sus características propias. La alimentación a base de exclusivamente de restos de comida humanos no satisfacen correctamente las necesidades metabólicas básicas de los animales de compañía y no aportan todos los nutrientes, vitaminas, minerales y otros componentes necesarios.
Existen cada vez más alimentos enriquecidos con probióticos para perros y gatos que ofrecen una modulación de la microbiota y alimentos funcionales dirigidos al bienestar intestinal.
Se ha evidenciado en estudios que la alimentación en perros a base de almidón con alto contenido de carbohidratos conduce a una disminución del amoníaco fecal. Por otro lado, las harinas de subproductos cárnicos con alto contenido proteico y harinas de carne de baja calidad conducen a un aumento del pH, disminución de ácidos propiónico y acético, aumento de ácidos grasos de cadena ramificada, ácido valérico y mayor concentración de calprotectina en las heces. Todos los perros alimentados con esta dieta desarrollaron diarrea.
Prebióticos en la nutrición canina y felina
Algunos estudios concluyen que la adición de prebióticos a la dieta puede ser beneficioso en perros y gatos. Su incorporación puede modular beneficiosamente la microbiota y la salud intestinal y posiblemente proteger a nuestros compañeros peludos de infecciones entéricas.
Si bien el gato es carnívoro, su microbiota intestinal es similar a la de los omnívoros en cuanto a las especies presentes y su diversidad. Añadir prebióticos puede tener un efecto positivo en las poblaciones microbianas intestinales en gatos.
Probióticos para perros y gatos
Los antibióticos usados habitualmente en el tratamiento de ciertas enfermedades reducen la población de bacterias beneficiosas y aumentan los niveles de los microorganismos potencialmente dañinos en la microbiota, conduciendo además al desarrollo de resistencia antimicrobiana.
Además, la terapia antibiótica tiene efectos a largo plazo en la microbiota intestinal. Los microorganismos con multirresistencia antimicrobiana como enterococos, pueden transferirse de los animales a las personas.
Existen productos probióticos formulados específicamente para gatos y para perros con eficacia científicamente probada. Suplementar la dieta de perros y gatos con probióticos, ya sean específicos o genéricos parece ser un modo de mantener y promover su salud gastrointestinal y bienestar.
Los posibles beneficios son:
- Modulación del sistema inmune
- Protección frente a infecciones causadas por enteropatógenos
- Apoyo en situaciones de estrés
- Incremento del crecimiento y desarrollo
- Control de las alergias
- Control de la obesidad
BENEFICIOS DE LOS PROBIÓTICOS
Son muchos los estudios que han puesto de manifiesto los posibles beneficios del aporte de probióticos en la dieta de perros y gatos. Los más relevantes son los siguientes:
Efecto de los probióticos en el sistema inmune
Algunos informes muestran que el uso de probióticos en la dieta mejora funciones específicas del sistema inmune en perros, en especial, os probióticos para cachorros y perros jóvenes.
- E. faecium SF68 como aditivo en pienso seco para cachorros hasta el año mostró un efecto adyuvante (capacidad para desencadenar una respuesta inmunológica) a nivel de la mucosa gastrointestinal y sistémico, siendo particularmente relevante para mejorar la protección frente a varios tipos de infección tanto durante el periodo crítico de las etapas más tempranas de vida como en las posteriores.
- L. rhamnosus GG se utilizó para el alivio y la prevención de los signos clínicos de la dermatitis atópica en perros genéticamente predispuestos. Se encontró que la exposición temprana de los cachorros a L. rhamnosus GG redujo los indicadores inmunológicos de la dermatitis atópica, disminuyendo significativamente la IgE específica del alérgeno en los primeros 6 meses de vida y su efecto positivo se observó hasta 3 años después de la interrupción de la administración de probióticos.
Efecto de los probióticos en los parámetros químicos clínicos
Los probióticos tienen potencial para el control de los niveles de proteínas y lípidos en perros y gatos.
- E. faecium EE3 redujo el total de lípidos y proteínas, controlando efectivamente el colesterol y manteniéndolo en niveles adecuados.
- L. fermentum AD1 aumentó el total de proteínas y lípidos reduciendo la glucosa en suero.
- B. animalis B/12 aumentó los niveles de ácidos orgánicos y redujo los de triglicéridos y albúmina en suero, incrementando la actividad fagocítica de los leucocitos.
Efecto de los probióticos en el sistema digestivo
Los problemas gastrointestinales son uno de los principales motivos por los que los propietarios acuden al veterinario con sus compañeros peludos. Los probióticos parecen ser una herramienta prometedora en el alivio de las enfermedades gastrointestinales en animales.
- E. faecium SF68 disminuyó significativamente los episodios de diarrea en gatos, aunque no en perros, por lo que no resultaría de utilidad en probióticos para perros con diarrea.
- L. acidophilus NCC2628, L. acidophilus NCC2766 y L. johnsonii NCC2667 mostraron efectos beneficiosos en los patrones de citoquinas intestinales y en la microbiota, disminuyendo el total de enterobacterias e incrementado el de lactobacilos en perros con diarrea causada por sensibilidad alimentaria. En perros sin sensibilidad alimentaria, la cepa L. acidophilus DSM13241 mejoró la consistencia fecal y disminuyó la frecuencia de defecación.
Los perros y los gatos son reservorios de Helicobacter, esta bacteria reside en el estómago y ocasionalmente en la boca, desde donde puede ser transmitida fácilmente a humanos. Su presencia se ha asociado con gastritis en perros y gatos. El único tratamiento es una triple terapia compuesta por dos antibióticos y un inhibidor de la bomba de protones, pero no siempre es efectiva. En niños humanos se ha usado L. casei DN-114 001 con gran éxito en la erradicación de Helicobacter por lo que el uso de probióticos para mascotas para combatir infecciones en perros y gatos podría ser también beneficioso.
Efecto de los probióticos en las enfermedades inflamatorias intestinales
Los síntomas clínicos de las enfermedades inflamatorias del intestino (IBD) en perros y gatos incluyen vómito, diarrea, pérdida de peso, inflamación y lesiones en tejidos del estómago, intestino delgado y el colon. Los animales con IBD presentan una microbiota intestinal alterada por lo que los probióticos podrían estar indicados.
Cuando los síntomas son severos, se suelen tratar tanto con intervención en la dieta, farmacológica, administración de inmunosupresores, dietas de eliminación e incluso manipulación de la microbiota entérica mediante antibióticos y suplementos alimenticios con prebióticos. Dado que los probióticos son capaces de alterar la microbiota y las respuestas inmunes, pueden ser de gran ayuda para reducir el riesgo de padecer IBD.
Comparando el uso de prednisona y metronidazol versus probiótico (combinación de cepas de distintas especies) durante dos meses, se ha encontrado un efecto protector del probiótico que disminuye y mejora varios marcadores relacionados con la inmunidad y así como la disbiosis intestinal.
En gatos con signos de enfermedad gastrointestinal, la mucosa presenta mayores niveles de enterobacterias asociadas. En gatos con colitis los niveles totales de bacterias y de especies de bifidobacterias y bacteroides se encuentran reducidos y aparecen compuestos derivados del azufre tóxicos producidos por Desulfovibrio spp. Una intervención dietética podría ayudar en estos casos, no obstante, hacen falta más estudios en el uso de probióticos para gatos con diarrea por IBD.
Efecto de los probióticos en los parásitos internos y virus
No existen estudios con resultados significativos sobre los efectos de prebióticos y probióticos para perros y gatos con parásitos internos y/o virus, aunque los resultados sugieren un efecto indirecto beneficioso.
- En un estudio doble ciego controlado con placebo en perros con diarrea aguda e intermitente, los parásitos fecales y virus fueron monitoreados antes y después de administrar el producto, no hubieron resultados concluyentes en cuanto a los recuentos de parásitos y virus.
- El uso de E. faecium SF68 durante 6 semanas como probiótico para perros cachorros con giardiasis crónica no afectó a la dispersión de quistes ni al contenido de antígenos y no alteró las respuestas inmunes innatas o adaptativas.
- El uso de una cepa genéticamente modificada de L. acidophilus durante 3 días como probióticos de gatos con el virus de la inmunodeficiencia felina sugirió que el probiótico tiene un papel regulador positivo en el transporte a través de la barrera epitelial gastrointestinal.
- En lactantes humanos hay resultados prometedores en cuanto al uso de probióticos y prebióticos específicos para el tratamiento de infecciones del tracto respiratorio causadas por rinovirus.
Efecto de los probióticos en las infecciones del tracto urogenital
La microbiota vaginal de las perras sanas está predominantemente colonizada por bacterias del ácido láctico que ejercen actividades antipatogénicas, por lo que tienen un potencial probiótico y podrían utilizarse para combatir las infecciones del tracto urinario en perros.
CONCLUSIONES sobre los prebióticos y probióticos en la alimentación de perros y gatos
Los probióticos (microorganismos) fomentan la vida gastrointestinal y los prebióticos (fibras no digeribles) el sustrato que les permite sobrevivir. La combinación de ambos puede aumentar la viabilidad de los probióticos y en la mayoría de casos se obtiene el máximo de beneficios en el menor tiempo posible. En particular, se han obtenido muy buenos resultados con prebióticos para gatos.
¿Es necesario dar probióticos a mi mascota?
Los probióticos se ingieren a través de la alimentación y a través de suplementos alimenticios. Si la alimentación de tu compañero peludo es pienso seco comercial, probablemente necesite un aporte extra. Además, dependiendo de su calidad, llevará más o menos ingredientes complicados de digerir y podría no estar absorbiendo los nutrientes necesarios.
Para asegurarte de que toma suficientes probióticos, puedes darle a tu perro o gato un suplemento probiótico (en la dosis y duración recomendada por el fabricante y tu veterinario) cada cierto tiempo.
¿Qué mascotas se benefician de suplementar con probióticos?
Animales senior y mayores, perros y gatos con diarrea, animales con IBD, gatos con enfermedades gastrointestinales, perros y gatos con colitis, gatos con inmunodeficiencia felina, gatos y perros con gastritis… en todos estos casos existen estudios científicos que demuestran beneficios significativos del uso de probióticos.
En líneas generales son óptimos para:
- Adultos y cachorros con diarrea y otros problemas gastrointestinales
- Perros y gatos senior
- Inmunodeprimidos y tras tratamiento de antibióticos (cáncer, vif, otros enfermos…)
- Animales sometidos a estrés (veterinario, viajes, cambios bruscos…)
- Mascotas con problemas digestivos y tras cambio de pienso/alimentación
- Animales desnutridos, que necesiten recuperar peso, engordar o aumentar masa muscular
Beneficios con evidencia científica
- Mejora de la microbiota o flora intestinal
- Mejora del sistema inmune y la inmunidad frente a infecciones
- Mejora de la digestión y la regulación del apetito
- Recuperación y tratamiento de la diarrea
- Control de alergias